Triunfan Manzanares y un bravo 'Zalduendo'

(Foto: Isabelle Dupin)

MICA CRESSENTY

Nimes (Francia). José María Manzanares y un bravo 'Zalduendo' han sido los grandes protagonistas en la corrida matinal celebrada en Nîmes. El alicantino se sirvió y desorejó en una sobresaliente labor a este astado, premiado con la vuelta al ruedo y para el que sonó la música por su bravura en varas. Tuvo en su mano la salida en hombros por la Puerta de los Cónsules, pero falló con la espada ante el sobrero que cerró el festejo. 

'Hospedero', el tercer toro de Zalduendo dio un espectáculo en varas, empujando fuerte en dos puyazos y haciendo que sonara la música durante el tercio. En la primera tanda de derechazos, cuando se dobló con él Manzanares, el astado se lastimó la mano, por lo que el torero se fue a por la espada. Antes de estoquearlo lo probó en otra tanda, y ahí vio que el toro iba entregado, con bravura y clase. Insistió Manzanares toreando a cámara lenta, mano baja y llenando mucho la escena. Remató de esrtocada contundente previo de la concesión de las dos orejas y la vuelta al ruedo para el animal. El sobrero que cerró plaza fue un ejemplar bronco. Manzanares estuvo capaz con él en una labor interesante por su desarrollo. Pudo tener premio, pero mató mal y fue silenciado.

Morante estuvo por encima de un toro de muy pocas opciones. Puso voluntad el de La Puebla, pero en su quehacer apenas sí pudo lograr momentos bellos sueltos por lo deslucido de su oponente. Volvió a poner voluntad Morante en su segundo, pero se topó con otro ejemplar de escasas prestaciones para el triunfo. Con el capote llegó lo mejor, saludando con el capote a una mano y dejando luego chicuelinas y una media en el mismo centro que levantó a los aficionados. En el último tercio el toro llegó sin fuerza, lo que marcó el conjunto. De nuevo sobresalieron detalles de Morante, que saludó una ovación.

Coliseo de Nimes. Tres cuartos de plaza. Toros de Zalduendo, vuelta al ruedo al tercero 'Hospedero', negro, de 532 kg. Finito de Córdoba, ovación y oreja tras tres avisos; Morante de la Puebla, silencio y ovación y José María Manzanares, dos orejas y silencio. Es la primera vez que Zalduendo lidia bajo la propiedad de Alberto Bailleres.